Eh! Que ahora soy autor del libro CANDY CANDY Más bonita cuando sonríe

Hola a todos, de nuevo por aquí actualizando un poco la web. 

Es sabido a nivel mundial que en tiempos de pandemia poco se puede hacer y sobre todo en lo que respecta al sector en el que trabajo normalmente como es el espectáculo y la música. Poco a poco se irá despejando el cielo de nubes y volverá a lucir el sol, así que os animo a aguantar un poco más que está por llegar el final del túnel.

Estoy muy emocionado, a la par que henchido de felicidad, debido a la noticia que os traigo en esta ocasión. El año pasado se alinearon los astros para dar luz verde a un maravilloso proyecto de la mano de la editorial Diábolo Ediciones. Podría publicar un ensayo basado en la figura del personaje, si no es uno de las más importantes para mí no existe otra igual, de Candy Candy.

CANDY CANDY ‘Más bonita cuando sonríe’ es ese libro que siempre quise tener y nunca llegaba. Es esa información que a lo largo de estos años costaba encontrar o adquirir debido a su alto precio. Pero del libro ya iremos hablando cuando vea la luz a finales del mes de Mayo y comencemos las charlas en los canales de manga y anime o entre los fans de Candy (como la entrevista que tengo este domingo, 16 de mayo, para el canal Comics Mundo). 

Quiero ahondar en mi historia con esta pizpireta heroína que es algo que he quedado fuera del libro por ser más personal y que quizás tendría que haber resumido colocándolo en alguna parte del ensayo, pero después de todo, con esto, podemos enriquecer este trabajo ampliando la experiencia desde las diferentes redes sociales que a día de hoy si existen pero que cuando todo empezó para mi aún quedaba mucho por que viera la luz el invento.
 
Candy apareció en la televisión española en el año 1984 cuando yo apenas contaba con cuatro años de edad. A día de hoy me es imposible recordar porque me llamaría tanto la atención aquella muchacha traviesa que se pasaba el día subida a los árboles y normalmente siempre había detrás un adulto para reñirle. Puedo suponer que el atractivo que le encontré a ella es el mismo que descubriría pocos años después con la sirenita Ariel (Disney). Ambas poseen un espíritu libre, con una vitalidad desbordante y un buen fardo de curiosidad. Tanto Ariel como Candy se rebelan en contra de sus mayores para poder vivir de la forma en la que ellas entienden la vida y eso es algo con lo que siempre me he sentido fuertemente identificado… aunque claro, ¿se deberá a haber visto a Candy con tan solo cuatro años? Creo ciegamente que fue así. Imaginaos mi sorpresa de pequeño cuando vi un tomo de Candy Candy en la librería en 1985. Acompañado de la ignorancia por ser tan joven y que Badajoz siempre ha sido un pequeña ciudad, que de no ser un boom mediático ni si quiera hubiera llegado ese tomo, no sabía que Candy ya llevaba bastante tiempo siendo publicada. Primero serializada en capítulos para la revista Lily, después como cuadernillos independientes y mas tarde como tomos de lujo. El tomo final que llega a mis manos podríamos llamarle como la cuarta versión del material. Así que durante lo que me duró ese tomo en las manos fui muy feliz, pues este pequeño travieso quiso tener el libro separado por capítulos y acabé destrozándolo. Afortunadamente uno crece y puede volver a conseguirlo mediante las páginas de segunda mano. Desde aquel momento toda protagonista rubia que aparecía en los dibujos animados era Candy. She-ra (Animation – Mattel), Lili y el misterio de la flor mágica de siete colores (Hanna No Lo Lun Lun), Eriko (Idol Densetsu Eriko) o Sailor Moon, entre otras muchas, fueron para mí el reflejo del anime de Candy Candy.


Y este pequeño amante de la cultura japonesa creció haciendo más fuerte su afición llegando a la época en la que los fans nos conocíamos mediante correspondencia (cartas que enviábamos por correo y nos tocaba esperar). Sobre 1998 conocí a Sunny Ghiba, también a otras personas, con la que conecté desde el principio y que además teníamos gustos similares. Ella fue con la que volví a tener material de Candy pero claro, mediante fotocopias y lo poco que podíamos tener. Internet era muy precario, con unas velocidades que hoy en día colapsarían los cerebros de más de uno ,y que como llamase alguien por el teléfono se cortaba la señal de internet, ahí es nada. Sunny y un servidor se hartaron de hacer dibujos y más dibujos de todas las series que nos gustaban pero en especial de Candy Candy que siempre fue nuestro nexo de unión. Años más tarde, cuando ya internet eclosionó, me encantó saberme amigo de una de las personas que más ha hecho por la comunidad de Candy trayendo los rips de los capítulos, en un principio de VHS (si Tamara, aún conservo tu cinta con los capítulos de Candy en castellano) y más tarde de los dvds para Hispanime.

Candy a formado siempre parte de mi vida de tal manera que en muchos momentos ha estado altamente influenciada. El amor lo he entendido de una forma bastante peculiar, que con el paso del tiempo ha ido evolucionando, o eso quiero creer, y las rosas blancas eran mi debilidad, esas flores eran las Dulce Candy que con tanto esmero había cultivado Anthony.

Al entrar en el año 2000 el amor por Candy se vuelve una locura. No por tener cosas de ella, ya que por un lado aún era complicado conseguir material y por otro los precios que han pedido siempre por estos productos son ofensivamente caros, dejando esto a un lado, allí que llegaba Tsukino, con su arte, se ponía a dibujar a Candy, cualquier trozo de papel le sirve: libro de texto, libreta de apuntes, servilletas, pizarras… menos mal que tenía fijación por alguna que otra serie y se intercalaban los personajes como Usagi Tsukino o Eriko (siempre las primas hermanas de Candy jajaja). Por aquel entonces ya me introducía en internet para saber cosas de Candy Candy y se podría decir que comencé a hacer algunos apuntes que con el paso del tiempo han concluido en el maravilloso libro que voy a publicar con Diábolo Ediciones.

Revisando archivos antiguos del ordenador, me aparecen unas imágenes recopiladas en 1999 pero es en 2006 cuando asoma un archivo de texto recopilando la historia y las fichas de los personajes. Es curioso como un proyecto va naciendo inconscientemente consiguiendo ver la luz finalmente sin casi uno proponérselo. Aunque es cierto que las pocas personas que me conocen en profundidad evidencia que tarde o temprano tenía que ocurrir porque mi fijación por Candy no es normal. Particularmente lo llamaría obsesión y creo no confundirme mucho.  

Para ir acabando, que tampoco quisiera extenderme mucho, acabaría por leerme el manga entero en 2003 y ver (y tener, al adquirirla desde latino américa) la serie de animación completa en 2007 descubriendo al fin muchas cosas que hasta aquel entonces no sabía. 

Lo bueno fue que en España nos quedamos con la idea de que Candy tras su paso por el colegio Saint Paul volvió al Hogar de Pony y ahí se quedó.


Bueno amigos y amigas, mas o menos aquí tenéis esta toma de contacto resumida con lo que fue para mi Candy. Son muchos recuerdos, anécdotas, momentos vividos con su imagen, su recuerdo y forma de entender la vida que juntos podremos rememorar, o eso espero, con 'Más Bonita Cuando Sonríe'. Y que con toda esta experiencia que dejé fuera del libro, por ser algo personal y que no tiene por que influenciar en la obra, os haga recordar vuestras experiencias. 

'Más Bonita Cuando Sonríe' es un libro de cabecera exclusivamente del fenómeno de Candy. Un viaje por el concepto del shojo y de donde nace, el lanzamiento del manga de Candy y su animación, el material que se vendió, como lo vivimos en España y en parte de Europa, las autoras y sus problemas... Es adentrarse en conocer una heroína atípica en los 70s y 80s que lucha contra viento y marea para que su entorno y las personas que va conociendo pueda llegar a ser felices de alguna manera. Valiente, fuerte, carismática, independiente. alegre, traviesa... watashi wa... watashi wa... watashi wa Candy!!


¡¡Gracias por leerme y nos vemos pronto!! 



"Que si, puede que esté loco.
Tengo mas manías 
de las que puedo contar 
con los dedos de una mano.
Sin embargo 
hay algo en ella
y en su manera
de abrazar mi locura
que asemeja al cielo
trayendo paz
al infierno."

modificación de B. moderno

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